Austin Kleon en su libro ‘Roba como un artista’ señala que ‘los malos artistas copian, pero los buenos… roban’.
Todos somos un cúmulo de referentes e ideas ajenas. La diferencia es ‘la sazón’ que le ponemos: nuestra mirada, nuestro toque, nuestra personalidad (no tienen IDEA de las veces que escucho en asesorías y talleres frases del tipo ‘esta marca se está copiando de mí’).
Y sí, encontrar la tan anhelada ‘voz propia’ es un camino que lleva años. El problema es que algunos creativos, emprendedores y empresarios se centran tanto en el resultado final que se les olvida disfrutar el proceso.
Siento que el momento ideal en el que encuentras esa voz es cuando:
1️⃣ Te sientes a gusto contigo (y con tus productos y servicios).
2️⃣ Entiendes que innovar es una actividad de por vida. La mejora continua es un trabajo disciplinado.
3️⃣ Te centras más en ti que en el otro.
4️⃣ Aprendes a ver los errores como puntos de mejora.
5️⃣ Recuerdas que la vida es un ratico.
Y créeme, si alguien te está copiando de verdad (un plagio, con implicaciones legales implícitas) será tu propia comunidad la que se de cuenta.
Nadie es más ni menos que tú.
Todos tenemos un brillo que nos hace únicos. Y también, referentes a los que admiramos.
Que este 2021 aprendas a ver a tus competidores como maestros y no como obstáculos a vencer.
Y roba, roba como un artista.
Así, sin más.