Desde niños hemos estado acostumbrados a rodearnos de historias: para comer, para dormir, para vivir.
Y las redes sociales no escapan al maravilloso mundo de la narrativa.
Queremos que nos enamoren, que nos sorprendan, que nos cuenten por qué debemos elegir una opción por encima de otra… en fin, que nos conquisten con la palabra.
Pero, ¿realmente lo hacemos con nuestras marcas?
Hoy, es un buen día para tomar lápiz y papel y realizar el siguiente ejercicio.
1. ¿En qué formato tienes más habilidades y destrezas para contar una historia? ¿Textos, audios, videos?
2. ¿Con cuánta frecuencia le cuentas a tu audiencia historias sobre tu marca? Por ejemplo: cómo comenzó el proyecto o qué te motiva a seguir.
3. ¿Has desarrollado esas historias? Elabora un listado de diez cosas que quisieras contar.
Por favor comparte este post con todos aquellos que creas que puedan necesitarlo.
Seamos multiplicadores del conocimiento bilateral y de la creatividad: esa que enciende, esa que seduce.